Un empujón al servicio del medio ambiente
2008, R. Thaler y C.R. Sunstein desarrolla el concepto de "empujón" en su libro Un pequeño empujón (Nudge): el impulso que necesitas para tomar las mejores decisiones en salud, dinero y felicidad. Este libro presenta las principales lecciones de más de 40 años de investigación para comprender mejor cómo los individuos toman sus decisiones diarias e identificar los factores que les influyen. El libro marca un punto de inflexión en la comprensión de los factores del cambio de comportamiento de los individuos, ya sean ciudadanos, usuarios o consumidores.
Desde su lanzamiento, esta publicación ha valido a uno de los autores el Premio Nobel de Economía y al otro convertirse en asesor del presidente Barack Obama.
Los gobiernos también están aprovechando esta corriente. El nudge es una palanca adicional: un incentivo consciente o no que permite orientar el comportamiento en la dirección deseada... David Cameron en Gran Bretaña o Barack Obama en los EE. UU., así como las empresas más grandes del mundo, han decidido aplicar las lecciones aprendidas de la revolución de la economía del comportamiento (ya desarrollada en la obra de Allais en 1957) que subyacen en las estrategias nudge con resultados excepcionales. En Francia, la SGMAP (Secretaría General para la Modernización de la Acción Pública, adscrita al Primer Ministro), el GIS (Servicio de Información Gubernamental) y varios ministerios aplican este enfoque.
¿Qué es el nudge?
Empujón, incentivo, estímulo, acicate... la idea de acompañar a los individuos en sus decisiones para paliar los sesgos cognitivos que determinan algunas de sus elecciones. Diariamente tomamos decisiones espontáneas que responden a mecánicas internas que no siempre son las más razonables ni las mejores para el bien común: ¿un problema con los residuos en los parques? Juegue con las papeleras y los viandantes se divertirán clasificando los residuos. ¿Quiere fomentar el deporte? Cree un piano gigante en las escaleras y los transeúntes usarán menos las escaleras mecánicas. Y así podríamos encontrar muchos otros ejemplos. Brotan de la imaginación de personas creativas y aparecen en nuestras calles, cafeterías y lugares públicos.
Actuar rápidamente, gestionar el exceso de información, dar significado, la memoria, los hábitos... todos estos mecanismos influyen en la toma de decisiones. Los nudges funcionan: hemos visto tramos de carreteras donde se ha reducido la accidentalidad en un 36 % gracias a las marcas de suelo inteligentes. Pero ¿cómo hace un investigador responsable de aplicar métodos funcionales en áreas singulares?
Podríamos mencionar una gran cantidad de ejemplos similares referidos a una amplia gama de fenómenos estudiados por la psicología cognitiva.
¿Cómo funciona?
En 1974, dos psicólogos, Tversky y Kahneman, desarrollaron el concepto de sesgo cognitivo en el que se basan el nudge y que podría resumirse como cambios involuntarios entre la realidad y la razón. Por ejemplo, Thaler y Sunstein (2008, pág. 31) señalan que menos del 5 % de los estudiantes de una promoción de Administración y Dirección de Empresas piensa que obtendrá una nota inferior a la media. Nuestra confianza en nosotros mismos supera por tanto las realidades estadísticas. Otro ejemplo, aceptaríamos tener que caminar 10 minutos para ahorrarnos 10 € en un libro que cuesta 25 €, pero probablemente no lo haríamos para un smartphone que cueste 795 €. El importe es el mismo; la elección, diferente.
Vinovert y los nudges
El proyecto Vinovert persigue objetivos de bien común: reducir los insumos en la viticultura y acompañar a los profesionales en su transformación. Estudia, prueba y analiza muchas dimensiones del problema y busca construir soluciones operativas. Su proximidad con los sectores profesionales hace que resulte una experiencia única y difícil.
Los economistas de Vinovert imaginan, experimentan y miden los efectos de los nudges especialmente diseñados para los profesionales del sector vitivinícola en la región SUDOE. Se adaptan a la investigación y la experimentación y estudian con las cooperativas del proyecto una gama de herramientas adaptadas a los cultivos españoles, franceses y portugueses. Buscan nuevas formas de introducir prácticas diferentes, más respetuosas con el medio ambiente y económicamente mejores para todos, desde los consumidores hasta los productores.
En concreto, se trata de crear nudges adaptados al cambio del uso de pesticidas en la viticultura, proponer a las cooperativas herramientas complementarias o sustituibles para la adopción de innovaciones o certificaciones y, en cualquier caso, necesarias para estas iniciativas a más largo plazo. El dispositivo no se limita a trabajar solo en los aspectos espontáneos de la modificación del comportamiento o en la comunicación en torno a las normas sociales que se espera que el viticultor adopte. Sobre todo proporciona estímulos a largo plazo demostrando cómo el nudge permite además paliar la falta de información de los viticultores. Un "buen" nudge debe funcionar a largo plazo, cuando el individuo concernido (en nuestro caso, el enólogo) conoce perfectamente el objetivo de la operación. Una apuesta ganadora para todos que ilustra a la perfección el valor de la investigación aplicada a los profesionales.
Bibliografía:
Allais (1953), El comportamiento del hombre racional frente al riesgo: una crítica de los postulados y axiomas de la escuela americana, Econometrica, 1953, v. 21, págs. 503/546.
Kahneman sistema 1, sistema 2
Thaler & Sunstein (2008) Un pequeño empujón (Nudge): el impulso que necesitas para tomar las mejores decisiones en salud, dinero y felicidad